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Artículo del cuerpo:
En un pasado no demasiado lejano, los escritos del testador fueron la única evidencia de sus intenciones y la capacidad mental. influencia indebida fue más difícil de defender en contra cuando la única prueba era el testador, los escritos de los oficiales administrativos y el recuerdo de quienes les rodean. Imagine la escena, la sala del tribunal envasados (tal vez tengo un gusto por lo dramático), el testimonio sobre el fallecido, la salud mental y los oficiales administrativos que la influencia ejercida sobre ellos por sus cuidadores final y miembros cercanos de la familia hizo el testador, la salud mental de los oficiales administrativos y la influencia de otros sobre ellos una cuestión de los testimonios de los vivos y los que a menudo participan en impugnar o defender la voluntad.
Pero hoy existen nuevas opciones que hacen que sea mucho más fácil para el de cujus a presentar pruebas después de que hayan fallecido. La primera pregunta que debe plantearse en un concurso que implique la capacidad mental es el de la deficiencia mental. La deficiencia mental es demostrado por el testador no ser capaz de comprender lo que él / ella es propietaria, a quien se le está dando y cómo se transferirán además de los efectos globales de transferencia de ese tipo deberá en su finca como un todo. Anteriormente esto sólo podía hacerse por escrito y se sospecha a menudo que el abogado que representa a la persona fallecida podría haber ayudado a que la escritura tiene todos los componentes necesarios, lo que hace la doctrina más flexible y abierto a la interpretación judicial de jurado o que una cuestión clara de los hechos.
Sin embargo, hoy el proceso puede consistir en someter el testador explica en la cinta de vídeo lo que el activo es, cómo se va a transferir ya quién, y todas las implicaciones de que la transferencia de la propiedad en general. Es más fácil ver al fallecido, para ver si él o ella parece comprender todas las implicaciones y para ver si él / ella es el tipo de persona que es querida tan débil como para ser susceptibles a la influencia indebida. Además, la protección de su cliente haciendo que se explican en su puño y letra y, en un par de ocasiones, en una cinta de vídeo altera el paisaje esencial de la sala de procedimientos judiciales, haciendo que el fallecido uno de los testigos.
Además, a menudo es útil para enviar un cliente a un psiquiatra para verificar su estado de salud mental y la agudeza de forma continua. Esto evidencia que los impugnar el instrumento testamentaria no ser fácilmente capaz de contrarrestar, porque no tienen su propio psiquiatra que ha tenido acceso al testador. Esta es una carta excelente para tener en su arsenal como abogado con el fin de proteger a su cliente, los intereses de los oficiales administrativos que a su vez altera el paisaje de la actuación judicial, si la voluntad se pone en duda. Cuestiones relativas a si un cliente es mentalmente capaz de entender sus legados, las implicaciones de esos legados, y la relación de los legados con el resto de sus bienes, así como formular preguntas acerca de hasta qué punto, en su caso, su propia personalidad estaba disminuyendo y susceptible a la influencia indebida se puede responder en forma diferente. Cuanto más el juez y el jurado podrán ver el testador, ¿cómo se comportaban, y cómo lúcido y en el control de sus facultades que al parecer, cuanto más el juicio con respecto a los testamentos estará en función de una percepción más directa del testador en lugar de una que ofrecen las cuentas de segunda mano. El planificador de bienes sabio utilizar la cinta de vídeo, en relación con la psiquiatría y estandarizado pruebas psiquiátricas para demostrar que el testador sabía exactamente lo que él / ella estaba haciendo y no paralizado ser, como en días pasados, por la percepción de los demás.
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